Del Odio al Amor hay sólo un paso
Y siempre se odia lo querido,
Que por azares del destino o el acaso
Se deja en el ser un corazón herido.
Sentimientos encontrados en el alma,
Nos hacen sufrir y laceran la razón,
Y perdemos la paz y la calma
Y llora y sangra nuestro corazón.
Hay de aquel que se aferra al orgullo,
Y no quiere la partida perder
Porque su argumento es de Perogrullo
Y no sabe su craso error reconocer.
Más basta una mirada y una palabra,
Con un poco de amor aderezadas,
Para que nuestro pecho se abra,
Y deje nuestras almas enlazadas.
Se puede odiar y amar con embeleso
Más el odio envenena la conciencia,
Sólo el amor nos lleva hacia lo excelso
Con tolerancia, sensatez y paciencia.
Cuando se trata de los enamorados
Es sólo una rutina sus enojos,
Al poco tiempo los vemos abrazados
Acariciándose y mirándose a los ojos.
El odio sin embargo, es duradero,
Entre seres que se han querido,
El rencor se torna verdadero
Y la culpa ninguno la ha admitido.
Más el odio socava nuestra mente
Y el alma más se ennegrece,
Porque siempre irremediablemente
Poco a poco nuestra vida se entristece.
En cambio el Amor todo lo vence,
El que ama está más cerca del Creador,
Y como única arma nos dio como patente
Para ser vencedores del odio, con Amor.
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